Por Yesid Francisco Perea Mosquera
Viendo las noticias a través de Caracol Televisión, nos hemos enterado, por un recorrido que están haciendo sus periodistas por el caribe colombiano, de un fenómeno implementado en la ciudad de Cartagena, denominado Ollas Comunitarias; este programa, que cuenta con el apoyo del gobierno nacional y de la Alcaldía de Cartagena, según la manifestación de una lideresa de una zona deprimida de la capital bolivarense, se ha convertido en la gran posibilidad alimentaria de niños, mujeres gestantes, jóvenes y adultos de la tercera edad, para conseguir un plato (mejor, tres platos) de comida al día.
Las mujeres cabeza de familia o con pareja, saben que esa olla comunitaria es la salvación de sus familias, de sus niños, pues es bien sabido por todos, las dificultades laborales de nuestro país, incluso para quienes han estudiado; imagínense lo que pasa con aquellos que no han tenido esta oportunidad. El sustento, en el caso de Villa Gloria, pues así se llama la comunidad, era básicamente la actividad pesquera, pero denuncian el incremento de las dificultades para poder llevar un pescado a la casa, debido a la alta contaminación de la ciénaga donde han pescado siempre; queda como alternativa la albañilería y las manualidades, es decir, nada fácil. Pues bien, por qué no implementar ollas comunitarias en nuestro departamento para suplir tantas necesidades alimentarias como las que padecen los nuestros; sería una gran oportunidad para ayudar a nuestra niñez y a esa comunidad tan necesitada de un plato de comida caliente y bien preparado.
Invito a nuestros mandatarios a considerar esta posibilidad, porque en cada Municipio encontramos zonas con mayor vulnerabilidad, las cuales no cuentan con la posibilidad de tan siquiera un plato de comida al día y entonces, para llevarlo a sus hijos, sobrinos, tíos o a sus padres adultos mayores, les toca acudir a la delincuencia, pues debe ser muy verraco escuchar a un ser querido llorar por un plato de comida sin tener posibilidad de ofrecerlo; es una simple idea, en razón a los buenos resultados obtenidos en Cartagena, donde también hay mucha pobreza.
