EL NIÑO JESÚS POR SUS FUEROS

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Por Yesid Francisco Perea Mosquera
Hasta mediados del año pasado si la mente no me traiciona, transitar por las calles del Barrio Niño Jesús de la capital de los chocoanos, era complicado en razón al deterioro del pavimento que las recubría; luego comenzó el rompimiento del cemento y las reparaciones o reemplazos del sistema de alcantarillado en gran parte del barrio. Todo lo anterior conllevó reales dificultades para la movilidad, inclusive en motos, ya se imaginarán los padecimientos de quienes nos movilizamos en carros, pues ciertamente acometieron trabajos simultáneamente en las pocas vías de acceso y salida al barrio, lo cual fue un caos total.
Después de varios largos meses, las cosas están muy avanzadas y hoy ya se desembotelló el sector, logrando culminar gran parte de la pavimentación, también el sistema de alcantarillas intervenido, y bueno, la imagen de nuestras calles ha cambiado, especialmente la vía que desde la Capilla de Fátima o desde la Plaza del Mercado si se quiere, conduce al corazón del mencionado sector de Quibdó. Lo que antes eran huecos y pavimentos reventados por su antigüedad, su uso y por la irresponsabilidad de varios vecinos, quienes rompen para arreglar alcantarillado, acometer tuberías de acueducto o para sus necesidades particulares y luego dejan así o tapan mal lo que rompieron, ahora se ve de mejor manera, ofreciendo a los propios y extraños un panorama mucho más agradable que aquello que antes teníamos.
Lo anterior impone la necesidad de, si es que no estuviera contemplado en el contrato de pavimentación, realizar una nueva contratación para iluminar toda el área intervenida, ubicando luminarias desde la plaza de mercado subiendo por la vía principal, hasta la normal, pasando por el depósito de coca cola y terminando en el estadio. Disculpen mis pretensiones, pero nuestro barrio, uno de los más tradicionales y reconocidos en esta villa de Asís, debe recuperar su nombre y distinción, pues sus residentes no merecemos estar agobiados por la delincuencia y el desasosiego. Permita Dios que esta nueva fachada haga llegar negocios, emprendimientos y seguridad, ahora que es posible la implementación de los Frentes de Seguridad, bajo el liderazgo de la Policía Nacional; varios vecinos han instalado luminarias en sus residencias en razón a la oscuridad que reinaba en los alrededores de su casa, así se aporta a la seguridad, pues lo oscuro es proclive al delito.

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