En un esfuerzo conjunto que involucró a autoridades étnico-territoriales, organizaciones sociales, e instituciones de la región, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) ha logrado un avance significativo en la cuenca del río Salaquí. Tras más de 20 días de intensa labor en este enclave del Chocó, la misión humanitaria culminó con la recuperación de diez cuerpos, un acto lleno de esperanza para las familias y comunidades afectadas por desapariciones forzadas.
La investigación, que se extendió por más de un año en un territorio marcado por su rica historia y memoria colectiva, ha sido un ejemplo de la importancia de la colaboración entre distintos sectores. Los investigadores de la UBPD, apoyados por el Consejo Comunitario de la cuenca del río Salaquí y otras organizaciones como Proclade-Colven y la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Riosucio, han desempeñado un papel crucial en el establecimiento de un diálogo que asegura la participación activa de la comunidad en la búsqueda.
Esta recuperación no solo representa un paso adelante en la difícil tarea de encontrar a los desaparecidos, sino que también subraya el compromiso inquebrantable de las familias y la comunidad en general hacia este noble objetivo. «Todo esfuerzo vale porque es gratificante encontrar a las personas desaparecidas», comenta Luisa Fernanda Gutiérrez, investigadora de la UBPD, destacando la importancia de continuar este trabajo articulado.
La mayoría de los cuerpos recuperados podrían corresponder a víctimas de una incursión armada que sacudió la región en abril de 1999, lo que añade un capítulo crucial en la búsqueda de justicia y verdad para las familias afectadas. La labor de identificación, ahora en manos del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses en Medellín, será el próximo paso en este proceso de esclarecimiento y reparación.
Esta acción humanitaria no solo refleja el compromiso de la UBPD con la búsqueda de personas desaparecidas con un enfoque étnico y territorial, sino que también fortalece la relación de confianza y cooperación con las comunidades afectadas. Con cada descubrimiento, se renueva la esperanza y se reafirma la determinación de seguir avanzando en este camino de memoria, verdad y justicia.
Para aquellos que buscan a sus seres queridos o tienen información que pueda contribuir a estas misiones, la UBPD recuerda que la colaboración es clave y asegura la confidencialidad de los datos suministrados. Este esfuerzo conjunto no solo ilumina el camino hacia la reparación, sino que también honra la memoria de quienes han desaparecido, asegurando que no sean olvidados.
